Tenerife

Todo lo que debes saber sobre el ron canario

En esta tierra de fuego y agua hay un licor que ejemplifica a la perfección las esencia mestiza de su cultura y su gente. El ron canario es sin duda uno de los patrimonios gastronómicos de las islas y un motivo de orgullo que ningún residente debe dejar atrás. Si desde que pisaste por primera vez estos lugares sentiste el irrefrenable impulso de mimetizarte con las maravillosas gentes de esta isla, adoptando sus hábitos y costumbres como un tinerfeño más, hoy te encantará conocer este licor que nos ayuda a celebrar la vida y compartir un poco de la cultura, el folklore y el dulzor de las Islas Afortunadas. Y es que hablar del origen del ron es hablar de Canarias y es aquí donde se produce, además, una de sus variedades más deliciosas: el exquisito ronmiel.

El ron es una bebida alcohólica de tonalidad dorada, brillante y traslúcida, más intensa cuanto más añeja. Procedente de la caña de azúcar, los aromas que desprende y su inconfundible sabor -más suave cuanto más joven-  son ideales para mezclar con cítricos en un refrescante mojito o, simplemente, para degustar en un cubalibre. A medida que el ron coge cuerpo, puede que incluso lo prefieras solo, sin olvidar el toque que el ron puede añadir a tus recetas, por ejemplo, en la maceración de carne.

La historia del ron surge en el continente americano pero lo cierto es que las primeras cañas de azúcar que se sembraron al otro lado del Atlántico partieron de las Canarias. Fue en 1493, en el segundo viaje a las Antillas de Cristóbal Colón. Ya en 1494, las plantas empezaron a florecer y el almirante escribió al Rey de España: “Mi Señor, la caña de azúcar está creciendo bien y con éxito”. La cuestión es que el ron surgió casi por casualidad…

Cuando se talaban las primeras cañas de azúcar en las Antillas, los tallos se exprimían para extraer el jugo pero el excedente o melaza se fermentaba. Alguien bebió ese jugo y, posteriormente, empezó a popularizarse una bebida a partir del guarapo de caña llamada tafia, que reponía a los trabajadores después de los duros días de trabajo. Cuando los colonizadores comprobaron que el almíbar expuesto al sol podía mezclarse con agua y fermentar hasta convertirse en algo parecido al ron actual, el negocio ya era un hecho. Comenzó a exportarse a Europa erigiéndose como la principal moneda de cambio en el comercio colonial americano entre los siglos XVII y XVIII. Así, se convirtió en la primera bebida destilada que alcanzó niveles industriales.

Tal fue la fama del ron que su producción no tardó en extenderse más allá de las Antillas. La bebida llegaba a las colonias inglesas en América pero el volumen de la demanda hizo que se establecieran destilerías también en Nueva Inglaterra, como precedente de lo que acabaría ocurriendo en las Islas Canarias. En la localidad de Arucas, en Gran Canaria, se dice que desde el siglo XVIII los monjes ya destilaban ron en los conventos. La bebida alcohólica comenzó a conocerse entre la población y en 1884 se fundó la Fábrica de Azúcar de San Pedro, la bodega de destilados más antigua de Europa y que se convirtió en proveedora de la Casa Real. Pero el ron canario no se redujo a esta isla y también Tenerife tiene fuerte presencia en el mercado y hoy por hoy es un gran motivo de orgullo junto con la cada vez más conocida industria de los vinos canarios.

Hoy en día, en el producto final, es clave la cuidada elaboración del destilado, fruto de siglos de tradición, pero, sin duda, la materia prima esconde el principal secreto del ron canario. La bebida varía mucho según la zona de producción y, en el caso de Canarias, no podemos dejar de mencionar el ronmiel, una fórmula única en el mundo distinguida por su procedencia con la Denominación de Origen Protegida. Elaborado a partir de aguardiente o melaza, debe su nombre a la cantidad de miel que incorpora, superior al 2% del volumen total. Existen diferentes bodegas canarias especializadas en la producción de este delicioso licor así que te animamos a que, poco a poco y con moderación, vayas descubriendo este elixir de delicioso dulzor.

¿Sabías lo que esconde una de las bebidas canarias que, sin duda, debes tener en cuenta en las fiestas y reuniones? El ron canario tiene ese especial toque isleño, por su color dorado y sabor dulce, que no puedes dejar escapar…